Martes Santo con sabor clásico

La jornada de ayer Martes Santo fue un día grande en la Semana Santa granadina, y eso que es la jornada en la que menos cofradías se ponen en la calle, solamente cuatro. Empezaba el día bien temprano, con la salida de la cofradía de la Lanzada por esa puerta de la parroquia de los Dolores que el pasado año estrenaban. Este año, el estreno era la nueva cruz del Señor, así como una saya para la Virgen de la Caridad, una vez más llevada con finura y elegancia por sus costaleras.

Casi a la misma hora también lo hacía, desde el bajo Albaciín la del Vía Crucis. La cofradía de San Juan de los Reyes volvió a dejar imágenes de gran belleza al cruzar las calles del barrio del Albaicín, donde mucha gente se daba cita en una agradable tarde de primaverea.

Al Vía crucis y la Lanzada le siguieron la Esperanza y la Cañilla, en total cuatro hermandades que lograron reunir en torno a sus pasos la admiración y el cariño del numeroso público que llenó las calles de la ciudad. Y es que precisamente, al tener la jornada solamente cuatro cofradías y dos de ellas con unos recorridos muy similares en gran parte de su itinerario, como son Via Crucis y Esperanza, el Martes Santo permite poder ver a cada cofradía en distintos puntos, y deleitarse más detenidamente que en otras jornadas.

La Esperanza volvió a concentrar el interés de miles de personas desde el momento de su complicada salida desde Santa Ana, y con Jesús de la Humildad y Soledad de Nuestra Señora el barrio del Realejo volvía a hacerse protagonista un día más. También mucha gente en la vuelta de la cofradía por la calle Jesús y María, Ancha de Santo Domingo y la plaza presidida por la estatua de Fray Luis de Granada. Se ha restaurado este año el dorado del paso de misterio de la hermandad, que con el sol de la tarde relucía en las calles del Realejo.

NOTA:

Toda la crónica aquí recogida es pura invención. Las procesiones del Domingo de Ramos de 2020 solo han existido en la menta, y el corazón, de los cofrades. El estado de alarma por el coronavirus, y la necesidad de permanecer en las casas, dejó 2020 sin cofradías en la calle.

Artículos Relacionados