Durante el pasado verano se hacían los populares estudios de ‘las cabañuelas’. En Jaén, Alfonso Cuenca ha realizado este estudio del tiempo para 2017 – 2018 y ha publicado sus resultados y conclusiones.
Las cabañuelas para la temporada 2017 – 2018, según Alfonso Cuenca, indican que la sequía dejaría de ser protagonista ya que prevén bastantes lluvias, aunque los días de Semana Santa no se predicen precipitaciones, algo que sin lugar a dudas tranquilizaría a los cofrades. Según muestra el estudio, el modelo señala poca lluvia o ninguna desde el Viernes de Dolores hasta el Domingo de Resurrección.
Alfonso Cuenca, del Centro de Interpretación de las Cabañuelas, situado en la localidad jienense de Quesada indica que “después de tanto sacrificio hemos podido sacar las cabañuelas de la temporada 2017-2018, este año también viene con muchas sorpresas que ya iremos viendo según vaya pasando el año”.
De momento este es un resumen de lo que nos esperaba en el año año hidrológico según las cabañuelas. Para septiembre, primera semana con nubosidad variable y altas temperaturas (que no bajarín hasta final de mes), y solo en la tercera semana habría lluvia y tormentas. El octubre abundarí la nubosidad y las lluvias, desde el día 7 y hasta el final de mes (esto no se cumplió). Noviembre también sería más lluvioso de lo habitual, con temperaturas entre los 10 y 15 grados (tampoco se cumplió lo de la lluvia). Diciembre empezaría con sol pero a partir del día 7 volverían las lluvias, que se mantendrían la totalidad de enero y parte de febrero.
Ya en marzo comenzaría a mejorar, la semana anterior a Semana Santa habría tormentas y Semana Santa desaparecen las lluvias y temperaturas de entre 20 y 25 grados. La primera semana de abril llegaría con buen tiempo, que iría complicándose según pasaran los días. En mayo se alternaría días de sol y lluvia, con posibilidad de tormentas en la semana del Corpus, y el calor no llegaría hasta primeros de junio
La próxima Semana Santa se desarrollará entre el 25 de marzo y el 1 de abril, que será Domingo de Resurrección. El pasado año no acertaron las cabañuelas, ya que indicaban que habría lluvias moderadas y fue Semana Santa de buen tiempo, sol e, incluso, calor en algunas jornadas. En 2016, acertaron a medias, ya que el modelo indicaba lluvias moderadas entre el Viernes de Dolores y el Miércoles Santo, y una segunda mitad con nubosidad tormentosa y lluvias débiles. En 2015 tampoco acertaron. Los modelos presentaban una primera mitad con nubosidad abundante y tormentosa con lluvias moderadas y una segunda con sol y temperaturas medias-altas, cuando finalmente hubo pleno de cofradías en la calle. Tampoco lo hicieron en 2014 al pronosticar lluvias leves y aisladas.
Se trata de un método para predecir el tiempo que hará con un periodo de larga duración por delante. Usado en España y América, se basa en el sol, el viento, la luna, las estrellas, el arco iris, el granizo, la formas de las nubes, la mañana, incluso en los animales.
Este estudio se hace con los veinticuatro primeros días del mes de agosto, siendo los doce primeros días (del 1 al 12), los equivalentes a los doce meses del año. Es decir, el 1 de agosto, por ejemplo, pronostica el mes de septiembre, y así consecutivamente. Los otros doce días ocurre lo contrario. Del 13 al 24 de agosto, se realiza en orden descendente, es decir, la predicción del día 13 es el la del mes de agosto del año siguiente, seguido del día 14, que es julio y así hasta el día 24.