Resumen de cómo se desarrolló la última Semana Santa.
Según los datos que aportaba la Federación de Cofradías, en la Semana Santa de 2018 participaron un total de 13.400 cofrades en los distintos cortejos, unos datos que se pueden considerar muy notables teniendo en cuenta la no salida de cuatro de las treinta y dos corporaciones de la capital. De este modo, si dividimos esa cantidad entre las 28 hermandades que pasaron por la carrera oficial, sale una media de 478,57 hermanos en cada cortejo, lo que representa un incremento sostenido en el número de integrantes de los cortejos en un 24,49 %, tomando como referencia los datos obtenidos de paso de las hermandades por el palco de la Calle Ganivet, lugar hasta el que llegaba el Domingo de Ramos la cruz de guía de la Santa Cena, primera en hacer estación de penitencia, ya que la lluvia dejó en sus templos a la Borriquilla y la Sentencia. La Borriquilla lo intentó y tras poner la cruz de guía en la calle, finalmente se veía obligada a suspender su salida. El resto de hermandades del día si pudieron salir, siendo la primera en carrera oficial la de la Santa Cena. En el resto de la provincia las inclemencias meteorológicas también afectaron a algunas cofradías, aunque otras, como la Borriquita de Motril si pudo salir.
Por fortuna el tiempo mejoró en la jornada del Lunes Santo, que presentó un orden de paso de las hermandades por carrera oficial similar al de años anteriores, a pesar de la solicitud que hubo en Cuaresma de la cofradía del Huerto para pasar en primer lugar. Una jornada llena de contrastes, desde la alegría del Zaidín recibiendo a la cofradía de la Luz y el Trabajo al recogimiento de San Agustín. El sabor a barrio del Huerto, la belleza de los Dolores o la solemnidad del Rescate.
El Martes Santo se vivió con gran esplendor en la calle, abriendo la carrera oficial la cofradía del Víacrucis, sin faltar La Cañilla y la Esperanza. Pero la jornada estuvo marcado por el incidente de la cofradía de La Lanzada, que tuvo problemas en la sujeción de la cruz al paso, haciendo que este se cimbreara en exceso, lo que obligó a la hermandad a tener que quedarse en Catedral poniendo allí fin a su estación de penitencia. En la provincia, las cofradías que salen en el Martes Santo, también disfrutaron de buenas estaciones de penitencia, como por ejemplo la Flagelación en Guadix.
El Miércoles Santo si que pudo desarrollarse con total normalidad en la capital granadina, y muchísima gente en las calles arropando a las diferentes hermandades del día. Gitanos, Nazareno, Estudiantes, Rosario y Paciencia y Penas llenaron un día que dejó un recuerdo inolvidable. En la provincia destacaron hermandades como el Nazareno de Baza.
Con la llegada del Jueves Santo Granada vio como sus calles se desbordaban de gente, convirtiéndose el albaicín en el gran protagonista del día con hermandades como la Concha, la Estrella o la Aurora. Y no faltaron las cofradías de Salesianos y del Silencio, que a las doce en punto de la noche se ponía en las calles. La Carrera del Darro se presentaba con las luces apagadas, pero al llegar a Plaza Nueva los hermanos del Cristo de la Misericordia se encontraron con que no se había apagado el alumbrado. Ya en las últimas semanas venía hablándose de que el consistorio podía tomar la decisión de no apagar el alumbrado como medida de seguridad. Mucho se debatió sobre este tema, y aunque al final todo parecía indicar que las luces se apagarían como ha sido siempre, al final no fue así. La determinación causó un gran malestar entre los cofrades, sobre todo entre los hermanos del Silencio. En la provincia no faltaron momentos de gran esplendor, en ciudades como Guadix, Motril, Loja o Almuñécar.
Y así, llegó el Viernes Santo, cuando el mal tiempo volvió a deslucir la jornada., tanto en la capital como en otros puntos de la provincia. Afortunadamente se pudo desarrollar el acto del Paso, en Almuñécar, aunque con paraguas por la mañana. Pero la lluvia, al mediodía, impidió que la imagen de la Soledad de Santo Domingo llegara al Campo del Príncipe. La hermandad de La Cañilla suspendía la salida de su titular mariana, algo que ha ocurrido en contadísimas ocasiones a lo largo de la historia. Sin presencia de la Soledad se rezó ante el Cristo de piedra de los Favores. Por la tarde, y a pesar de que la lluvia no había desaparecido del todo, Ferroviarios se puso en la calle, presentando así el gran estreno que este año sacaba, la nueva imagen de la Magdalena. Llovía con fuerza al poco de salir el Cristo pero el cortejo siguió, volviéndose luego cuando iba a la altura de los jardines del Triunfo. Se paralizaba aquí la tarde, se reunían las juntas de gobierno de las hermandades y tras distintas deliberaciones y pequeños retrasos decidían salir, aunque poco después desde Santa Ana se anunciaba que el Santo Sepulcro no haría estación de penitencia. Favores, Escolapios y Chías si que salieron, aligerando bastante su paso y poniéndose en la carrera oficial a la hora prevista. La Soledad de San Jerónimo, incluso, adelantó su llegada para cubrir el hueco dejado por el Santo Sepulcro. La noche fue bastante fría, y temiendo una nueva aparición de la lluvia las tres hermandades se recogieron con celeridad.
Fue una jornada muy especial en la provincia, con múltiples procesiones repartidas por toda la geografía, aunque la lluvia interfirió en el buen desarrollo de la jornada. Ocurría, por ejemplo, en Padul, donde su gran tarde de Viernes Santo se veía deslucida por el mal tiempo.
Con el Sábado Santo y Domingo de Resurrección concluía la Semana Santa, nuevamente con buen tiempo. Pocas cofradías salen a las calles en la jornada del Sábado, aunque destacan algunas como Santa María de la Alhambra en Granada o la Soledad en Motril, hermandad que este año volvió a presentar a la imagen del Señor trasladada por personajes vivientes.
Y el Domingo de Resurrección llegaron las últimas procesiones a la capital y, en la provincia, algunas celebraciones tan curiosas como la de los petardos, en Cúllar Vega.
Uno de los incidentes más graves que dejó la última Semana Santa fueron los actos vandálicos que afectaron a las cofradías del Rosario, Estrella y Salesianos, a las que varios individuos arrojaron distintos objetos a su paso. El jefe de la Policía Local de Granada, José Antonio Moreno, recalcaba tras la Semana Santa el éxito del servicio policial diseñado para esas fechas en las que se tuvieron que practicar ocho detenciones, entre ellas los autores de los lanzamientos de objetos a los pasos, a quienes se denunciaba por un posible delito contra los sentimientos religiosos. En cualquier caso, insistió en que fue una Semana Santa excepcional desde el punto de vista de la seguridad. Los sucesos se producían el Miércoles Santo al pasar la cofradía del Rosario por la calle Varela, y el Jueves Santo a Salesianos por Sos del Rey Católico y, luego, a la Estrella al regresar por la Cuesta de la Alhacaba hacia Plaza Larga.
La de 2018 fue la primera Semana Santa con Metro, un medio de transporte que utilizaron 228.253 viajeros durante esos días. También importantes fueron las cifras de visitas que registró nuestra web y redes sociales. Por ejemplo, más de 293.000 impactos logró tener, durante la pasada Semana Santa, la cuenta de Twitter de esCofrade, en la que puntualmente se fue informando del desarrollo de cada una de las jornadas, con especial atención a lo que ocurría en las cofradías los días de lluvia. Nuestro compañero Manuel Puerta coordinó este importante trabajo para el que contamos con la colaboración de distintos amigos que, tanto desde la capital como desde diferentes puntos de la provincia, nos ayudaron a ofrecer información sobre lo que sucedía en las calles.
Granada capital registró un aumento de la estancia media hotelera esta Semana Santa, cuando el 70% de los turistas pernoctó durante tres o más noches en la ciudad. Una Semana Santa que, a pesar de la lluvia, quedará para la historia como unos días excelentes para nuestras hermandades y cofradías.