El Cabildo General de Hermanos reunido el pasado sábado aprobó por unanimidad la conversión del paso del Santísmo Cristo de la Buena Muerte en un misterio.
NOTA HERMANDAD:
La reunión, que estuvo presidida por nuestro consiliario, Antonio Jesús Martínez, contó con la presencia de un nutrido grupo de hermanos que respaldó con su voto el proyecto presentado por la Junta de Gobierno.
Tras las preces y la introducción a cargo del Hermano Mayor, el encargado de presentar el proyecto fue su autor, el escultor e imaginero José María Hurtado. Como no puede ser de otro modo, el nuevo misterio representará los instantes posteriores a la muerte de Cristo en el Calvario. Y para su configuración se han seguido las narraciones de los Evangelios.
Así, en la zona delantera, acompañando a la imagen de San María Magdalena figurarán María de Cleofás y Salomé. Reflejando el pasaje que dice ” Había allí unas mujeres que miraban desde lejos”.
A los pies del Señor figurará San Juan Evangelista, el discípulo amado, que es el único que mira de frente al cuerpo inerte del Redentor.
En la trasera del paso comienzan ya los preparativos para dar sepultura al cuerpo de Cristo antes de que comience el Sabat judío. El centurión, a caballo, entrega a José de Arimatea y a Nicodemo el permiso para descender a Jesús de la Cruz.
En palabras del José María Hurtado, su intención ha sido crear una escena en la que se muestren diferentes actitudes ante la muerte de Cristo. El dolor de las mujeres que se apartan y se consuelan mutuamente, el desgarrador vacío en el que queda sumido San Juan, el miedo de Nicodemo o la fortaleza de José de Arimatea que recoge el permiso para descender el cuerpo del Maestro. Actitudes que quedarán plasmadas mediante las posturas y gestos de los diferentes integrantes.
En el nuevo conjunto, todas las figuras se han dispuesto de tal modo que Cristo destaque en el centro. Además mediante un juego de miradas, proporciones y líneas imaginarias trazadas por las posturas corporales todos los integrantes del paso llevan al espectador a fijar su mirada en el cuerpo inerte del Salvador.
Con este planteamiento, aprobado por unanimidad de los asistentes, la Cofradía de los Ferroviarios plantea una escenografía hasta ahora inexistente en la ciudad, realizando así una aportación significativa a nuestra Semana Santa. Además las diferentes imágenes, sus gestos y posturas están inspiradas en la obra pictórica de Alonso Cano, la cual ha sido minuciosamente estudiada e interpretada de manera magistral por José María Hurtado.
Tras la presentación del proyecto, el Hermano Mayor, dejó claro que no se trata de una actuación que se vaya a llevar a cabo de manera inmediata. Con la aprobación de esta propuesta, la hermandad marca una línea clara de trabajo a seguir. La cual se irá ejecutando a medida que vaya siendo posible. En este sentido indicó que la hermandad continuará trabajando como hasta ahora y seguirá avanzando en aquellas actuaciones que están actualmente en curso, y especialmente en la ejecución del nuevo paso de palio para la Virgen del Amor y el Trabajo.