Desde hace más de un siglo, las vecinas del municipio granadino de Montefrío mantienen una curiosa tradición que tiene como protagonista una ‘capilla portátil’ de la Virgen de los Remedios, patrona del municipio, que cada día visita un domicilio, donde pasa 24 horas hasta que al día siguiente se lleva a otra casa.
Sin embargo, durante el confinamiento del pasado mes de marzo esta imagen desapareció, y las mujeres de esta localidad del Poniente no saben dónde está su Virgen desde entonces: puede que olvidada en alguna vivienda, o quizá en el domicilio de alguno de los vecinos que han fallecido debido al coronavirus en el último año.
Concepción Pérez y Pilar Carralcasar, dos vecinas de la localidad de 75 años, han iniciado una campaña a través de Facebook y en el propio municipio para buscar alguna pista que les conduzca hasta su Virgen, de la que son grandes devotas. Pero hay una razón fundamental: una de las vecinas que la recibían en casa tiene un familiar enfermo, y quiere pedirle a la Virgen por él para que se cure.
“Nosotras somos mayores y desde que empezó la pandemia, no salimos a la calle prácticamente – explica Concepción Pérez-. Cuando todo esto termine, porque no será eterno, visitaremos una por una a todas estas casas a buscar a nuestra Virgen, pero hemos empezado esta campaña porque no sabemos cómo encontrar la talla y queremos ayudar a nuestra vecina”.
Lista de espera para recibirla
La capilla portátil desaparecida tiene unos 40 centímetros de altura, y la talla de madera está dentro de una hornacina de cristal que se cierra con dos puertecillas de madera con un cerrojo. En una de ellas hay una lista con los nombres y dirección de las 30 vecinas por cuyas viviendas rota la imagen, y hay, incluso, lista de espera para apuntarse y recibirla en casa.
La capilla portátil, a cuya Virgen de los Remedios las vecinas ponen velas en su casa para rezarle, contiene también una pequeña hucha, cuya recaudación cada mes se dona a Cáritas o se lleva a la iglesia para alguna obra benéfica.
Concepción y Pilar señalan que la talla “es muy antigua, y desde hace más de un siglo cada noche ha dormido en una casa diferente, hasta que comenzó la pandemia y le perdimos la pista”. Por eso piden ayuda a los montefrieños: para que la Virgen de los Remedios aparezca de nuevo y vuelva a visitar las casas de sus devotos.
La alcaldesa de Montefrío, Remedios Gámez, pide colaboración a los vecinos “para encontrar esta imagen que desde hace tantísimos años ha visitado las casas de nuestras abuelas y nuestros padres para recibir el cariño de todos los montefrieños”.