El orfebre Alberto Quirós y la Cofradía de la Oración en el Huerto han suscrito un contrato para realizar los 12 varales del Paso de Palio, siguiendo el diseño de Juan Diaz Losada. Cincuenta y cinco (55) Familias de la Hermandad han apadrinado económicamente este proyecto que se hará realidad en la Semana Santa de 2024. El proyecto integral de diseño del Paso de Palio se aprobó en Cabildo de Hermanos en Octubre de 2004, habiéndose realizado hasta la fecha, la nueva parihuela y la estructura de los varales, la mayoría de la candelería en plata de ley, a través de una campaña en la que están colaborando con donativos los hermanos de la Cofradía. En Noviembre de 2014, se presentó totalmente terminado el techo de palio, con las caídas o bambalinas bordadas en oro a realce y sedas, por las Madres Comendadoras de Santiago. Asimismo, y realizadas por el orfebre Alberto Quirós, las cresterías y gloria central del techo de palio. En febrero de 2020 se aprobó en Cabildo General de Hermanos la realización de los 12 varales a través de un programa de apadrinamiento de los propios hermanos y otras actividades a organizar por la Cofradía.
La pandemia frenó esos ilusionantes proyectos, pero a partir de septiembre de 2021, coincidiendo con los cultos anuales de María Santísima de la Amargura se reinicia este proyecto que es acogido con entusiasmo y generosidad por muchos hermanos, consiguiéndose los objetivos previstos. Todo ello, ha permitido la firma del contrato de realización en el Orfebre. Cada familia ha apadrinado según sus posibilidades y eso, unido al inmenso amor que todos tienen hacia su Titular Dolorosa, ha hecho posible este maravilloso logro. Sin duda un proyecto de gran envergadura artística que aumentará, considerablemente, el ya extenso y rico patrimonio cofrade de la Semana Santa de Granada.
Descripción de los varales del Paso de Palio.
El diseño de los varales responde a elementos granadinos, serán sin duda varales en donde veremos arte de Granada en todos los aspectos. Serán realizados en metal plateado, con elementos sobredorados, esmaltes y piedras semipreciosas. En los doce varales del palio, queremos ver a los doce apóstoles, a las doce tribus de Israel, cualquiera de esos dos ejemplos valen para completar el simbolismo de un Paso de Palio. En nuestro caso, además, habrá referencias a nuestros Hermanos Mayores Honorarios, a los conventos de clausura que apadrinaron la Coronación Canónica, entre otros símbolos. El varal arranca con una base inspirada en la peana de mármol policromo sobre la que se asienta, en el camarín de su Basílica, la sagrada imagen de la Virgen de las Angustias, Patrona de Granada. Continúa con una pieza clásica, un estípite barroco, que se inspira en la retablística del mejor arte granadino del que tenemos ejemplo en muchos grandes retablos de nuestras iglesias, y en concreto, en el altar de San José de nuestra sede conventual, además que es un elemento referencial en el diseño general de nuestro paso de palio y especialmente de la candelería, aunque también se ha utilizado en los ciriales de acompañamiento y aparecerá en las esquinas de los respiraderos y en otras piezas a determinar y diseñar. En ese estípite se cuelgan unas guirnaldas de granadas doradas, que nos recuerdan nuestra ciudad, Granada, la que vio nacer nuestra hermandad, a la que nos debemos y por la que rezamos en nuestros cultos.
El varal continua invitándonos a hacernos peregrinos, la concha o venera de los peregrinos figura a continuación y orientada a los cuatro puntos cardinales. Punto de partida y llegada del Camino.
Una elegante columna estriada representa nuestra trayectoria vital y la historia de nuestra hermandad, a la mitad de esa columna una pieza preciosa dorada nos recuerda lo más brillante de nuestra historia, a la Casa Real de España, con las flores de lis, a los Caballeros de Santiago y al Cuerpo Nacional de Policía con las hojas de acanto símbolo de sacrificio y entrega hacia el prójimo. La columna termina en la Estrella de Santiago, la misma que figura encima del sepulcro del apóstol. Es la meta o el fin de nuestro peregrinaje.
A continuación podemos apreciar una de las piezas más exquisitas del varal, está inspirada directamente en una celosía conventual, en cuyas intersecciones se incrustan unas pequeñas hojas de acanto doradas y con piedras semipreciosas azules, todo ello simbolizando a la Comunidad de Monjas Comendadoras de Santiago, y a la Oración en la que continuamente nos tienen presentes. Su situación casi en lo más alto del varal, representan la vida de perfección del que se consagra a Dios. Una corona perlada simboliza el equipaje que debemos llevar a la otra vida, las buenas obras. El último tramo servirá para que los corbatines de terciopelo azul bordado en oro a realce, mantengan un estado de elegancia hasta llegar al remate con el que culmina el varal.
Todo este cuerpo simbólico en los varales, va completando el proyecto integral de lo que es la Casa de una Reina y Madre celestial. Simbolismo que empezó con la candelería, continuó exuberante en el techo de palio y en las caídas, en esta etapa con los doce varales y en un futuro se completará con los respiraderos, peana, jarras y brazos de cola. “ Per María nuncquam satis”.