La Hermandad vive estos días la Novena al Cristo de San Agustín, en esta ocasión de manera excepcional con motivo del V Centenario de la Sagrada Imagen.
El Sagrado Protector de la ciudad de Granada se encuentra en un imponente altar de cultos levantado por la Priostía al que no le falta ningún tipo de detalle, compuesto por un gran cortinaje de color negro, el dosel que envuelve a la talla, la candelería tiniebla, todo para dar protagonismo a la Santo Crucifijo.
Los hermanos de San Agustín renuevan así, una Cuaresma más, la devoción a su Sagrado Titular, preparándose interiormente para vivir este Tiempo Litúrgico.
Al finalizar el primer día de la Novena, se celebró el homenaje anual a los hermanos que este año cumplen las bodas de plata de pertenencia a la Hermandad.