Anécdotas de la vinculación ‘cofrade’ del futbolista que estos días es noticia.
El futbolista Guillerme Siqueira es noticia estos días al anunciar su retirada de los terrenos de juego. En poco tiempo logró convertirse en uno de los jugadores más carismáticos del Granada CF y en su paso por Granada se involucró plenamente en la vida de la ciudad, antes de marchar a otras ciudades como Madrid y Valencia. En Granada tuvo, también, sus contactos con el mundo cofrade, que fueron desde presenciar el paso de hermandades por las calles granadinas los días de Semana Santa a disfrutar de las ricas tapas que Vicente preparaba en ‘El Rincón del Cofrade’ de Cenes de la Vega.
Pero, además, Siqueira tuvo un contacto con la cofradía del Rosario, concretamente con el paso de Jesús de las Tres Caídas, una imagen que veía el futbolsita cada día en los vestuarios de Los Cármenes, donde antes de ser remodelada la instalación colgaba en una de sus paredes una cartel cofrade del Muy Antiguo y Milagroso Señor de las Tres Caídas.
Además, el periodista Fernando Argüelles recuerda como durante la grabación de un repotaje para Deportes Cuatro, el futbolista recibió un regalo muy especial. «Fue unos meses antes de la Semana Santa y grabábamos un reportaje sobre el día a día de Siqueira. Dábamos un paseo por la calle Oficios y el entorno de la Catedral y al pasar por la Plaza de Alonso Cano el, entonces, hermano mayor de la cofradía del Rosario le regaló una estampa de Jesús de las Tres Caídas al futbolista. Paco Castro salió de su tienda, se acercó a Siqueira y delante de las cámaras de Cuatro le entregó la foto del Señor y le dijo que seguro le daba fuerzas para meter muchos goles. Y así fue, al siguiente partido Siqueira daba alegrías a la afición rojiblanca».
La anécdota con esta cofradía no acaba aquí. «A las pocas semanas la hermandad del Rosario invitó al futbolista al futbolista a dar una de las primeras llamás en el paso de Jesús de las Tres Caídas el Miércoles Santo en el interior de Santo Domingo, lo que llenó a Siqueira de ilusión», rememora Fernando Argüelles. Pero, al final, el brasileño no pudo acudir a la cita, y tuvo que ser reemplazado por otro conocido jugador. «Los primeros días de la Semana Santa Siqueira había ido hasta Portugal a pasar los días con un exjugador del Granada, y al volver la mañana del Miércoles Santo para acudir a Santo Domingo su coche se le estropeó en Huelva. No iba a llegar a tiempo para estar en la salida de la hermandad, y además desde Sevilla se desplazaba un equipo de televisión de Cuatro para grabar ese momento, ya que el seguimiento que se le hacía al jugador aquellos meses era intensa. Tuvimos que poner en marcha un plan B y, así, llegamos a Santo Domingo el equipo de televisión y Roberto en sustitución de Siqueira, que finalmente hasta entrada la noche no llegó a Granada. Pero Roberto tampoco pudo tocar el martillo del Tres Caídas, ya que la tarde se cerró en agua y la hermandad tomaba la decisión de no salir. A pesar de ello, en el interior del templo dominico la cofradía del Rosario le entregaba a Roberto la medalla de la corporación para Siqueira».