La Virgen de la Cabeza y el Nazareno ya están en la Encarnación.
El pasado lunes se desarrollaba el traslado de las imágenes de Jesús Nazareno y la Virgen de la Cabeza a la iglesia de la Encarnación, inicio de la antigua tradición conocida en la ciudad costera como el ‘Día de los Terremotos’, y que tendrá su punto álgido el próximo domingo.
Durante estos día se celebran en la iglesia de la Encarnación los cultos de la renovación del Voto de la Ciudad. Motril tembló con violencia el 13 de enero del año 1804, un seísmo que arrasó parte de la ciudad y que se repitió 80 años más tarde, el día de Navidad de 1884, cuando un nuevo movimiento sacudió la localidad e hizo recordar a motrileños y motrileñas lo que ya habían sufrido antes. Entonces, la población se encomendó a sus patronos: Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Virgen de la Cabeza, a los que sacó en procesión y a quienes pidió que no volviera temblar la tierra, unos Votos que son ya una tradición arraigada y que se renueva cada mes de enero.
Esta tradición es una de las más arraigadas en Motril, con más de un siglo de antigüedad, y que permite ver procesionar a los dos Patrones de la Ciudad. Los actos recuerdan los terribles terremotos que la localidad vivió en 1804 y 1884.
El lunes la imagen del Nazareno acudió al santuario de la Virgen de la Cabeza para ‘recoger’ a la patrona motrileña para su traslado a la iglesia de la Encarnación. Numerosos motrileños acompañaron este traslado que volverá a repetirse el próximo domingo, cuando sobre las 21.00 horas, se realice el itinerario de vuelta de Nuestra Señora de la Cabeza a su Santuario, acompañada por el Nazareno, que desde lo alto del Cerro bendecirá la fértil vega motrileña.
Fotografías: redes sociales Hermandad Patronal de Motril.
