A partir de este lunes 18 de mayo los cofrades podrán reencontrarse con la mayoría de sus Cristos y Vírgenes. Granada comienza a recuperar por fin, aunque poco a poco, el pulso tras dos meses de confinamiento en el que no sólo se perdió el contacto personal sino también el devocional por la Covid-19.
A este 2020 le han robado la Semana Santa y la ciudad ha rezado a sus devociones por la pantalla de un móvil e incluso por los azulejos de las calles en pequeñas escapadas y ha escuchado misa por internet. Las iglesias reabren ahora, aunque sea solo con el aforo máximo permitido del 30%.
Los templos de la diócesis de Granada están preparados para abrir en la fase 1 del desconfinamiento por la Covid-19. El artículo 9 del decreto de la fase 1 del desconfinamiento, publicado el pasado 9 de mayo, permite la celebración de cultos con la debida distancia de seguridad, con uso de mascarilla y limitación de aforo.
Así, por ejemplo, la basílica de la Virgen de las Angustias ya está preparada: tendrá un aforo de 80 fieles por misa (habrá tres por día), y con apertura del templo para la oración personal de 9,15 a 11,00 y de 12,00 a 13,00 horas. Se establecerá también un circuito de circulación de personas entre la puerta principal y la lateral.
Dependiendo del aforo de los templos, así será el número de personas que puedan acceder a los mismos, teniendo además que cumplirse ciertas medidas, la principal la de guardar distancia social. No faltará, en la entrada a los templos, desinfectantes para las manos. Estas son las medidas exigidas:
1. Se permitirá la asistencia a lugares de culto siempre que no se supere un tercio de su aforo y que se cumplan las medidas generales de seguridad e higiene establecidas por las autoridades sanitarias.
2. No se podrá utilizar el exterior de los edificios ni la vía pública para la celebración de actos de culto.
3. Sin perjuicio de las recomendaciones de cada confesión en las que se tengan en cuentan las condiciones del ejercicio del culto propias de cada una de ellas, con carácter general se deberán observar las siguientes recomendaciones:
a) Uso de mascarilla con carácter general.
b) Antes de cada reunión o celebración, se deberán realizar tareas de desinfección de los espacios utilizados o que se vayan a utilizar, y durante el desarrollo de las actividades, se reiterará la desinfección de los objetos que se tocan con mayor frecuencia.
c) Se organizarán las entradas y salidas para evitar agrupaciones de personas en los accesos e inmediaciones de los lugares de culto.
d) Se pondrá a disposición del público dispensadores de geles hidroalcohólicos o desinfectantes con actividad virucida autorizados y registrados por el Ministerio de Sanidad, en todo caso en la entrada del lugar de culto, que deberán estar siempre en condiciones de uso.
e) No se permitirá el uso de agua bendecida y las abluciones rituales deberán realizarse en casa.
f) Se facilitará en el interior de los lugares de culto la distribución de los asistentes, señalizando si fuese necesario los asientos o zonas utilizables en función del aforo permitido en cada momento.
g) En los casos en los que los asistentes se sitúen directamente en el suelo y se descalcen antes de entrar en el lugar de culto, se usarán alfombras personales y se ubicará el calzado en los lugares estipulados, embolsado y separado.
h) Se limitará al menor tiempo posible la duración de los encuentros o celebraciones.
i) Durante el desarrollo de las reuniones o celebraciones, se evitará:
1.º El contacto personal, manteniendo en todo momento la distancia de seguridad.
2.º La distribución de cualquier tipo de objeto, libros o folletos.
3.º Tocar o besar objetos de devoción u otros objetos que habitualmente se manejen.
4.º La actuación de coros.