En recuerdo de la visita del Papa en junio de 1993.
A partir de ahora en el Santuario de la Virgen del Rocío podrá venerarse una reliquia de Juan Pablo II, el único Papa que ha visitado la aldea almonteña a lo largo de su historia.
El Padre Salvador Aguilera López hacía, días atrás, entrega a la Hermandad Matriz de Almonte de esta reliquia. La entrega tuvo su origen en la petición formulada por el presidente de la corporación, Juan Ignacio Reales Espina, en nombre de la Hdad. Matriz, quien aprovechando la reciente visita del Padre Aguilera a la ciudad de Cracovia, hizo llegar a su Eminencia el Cardenal Stanisław Dziwisz, Arzobispo emérito de Cracovia y secretario personal de San Juan Pablo II, la petición de una reliquia de tan gran Santo.
El objetivo es que la reliquia pueda ser venerada en el Santuario del Rocío, por todos los fieles que, como el Papa Rociero, van a ponerse a los pies de la Patrona de Almonte. Además, se ha pedido al Señor Cardenal que acepte la invitación para visitar el Santuario de la bienaventurada Virgen María del Rocío, al conmemorarse en este año el XXV aniversario de la visita de san Juan Pablo II. Su Eminencia ha tenido a bien aceptar la invitación y, al mismo tiempo, ha hecho entrega de una reliquia “ex sanguinis” del Santo Pontífice. El Sr. Cardenal, al mostrársele el cartel realizado por Raul Berzosa para la romería de este año, ha recordado la frase pronunciada por el Papa en ese viaje Apostólico: “que todo el mundo sea rociero!”.